Esta historia me la comento una amiga llamada verónica espero que les
guste.
Mi amiga verónica, vivía cerca de un terreno que estaba alambrado pero que tenía varios árboles, digo esto porque me relató otras historias que después les contare. Ella tenía un hermanito pequeño, como de un año y medio, al cual siempre lo ponían a descansar sobre una hamaca, la cual estaba en el cuarto de mi amiga y este tenía una ventana que miraba hacia el terreno lleno de árboles y monte.
Un día, como a las seis de la tarde, se fue la luz en toda la colonia, donde vivía mi amiga, por lo que su casa quedó a obscuras, entonces su mamá. la mandó por el bebé pues estaba durmiendo y cuando despertara le iba a dar miedo, al ver la obscuridad. Ella pasó primero a su cuarto por una lámpara de mano, para iluminarse, pues el cuarto de sus padres estaba al fondo y ahí estaba el bebé, pues esta vez, no lo habían colocado en la hamaca para que durmiera, con la lámpara en la mano verónica, se dispuso a ir hacia el cuarto de sus padres, pero tenía algo de miedo.
Cada vez que daba un paso, sentía que alguien la miraba por detrás, pero como quería mucho a su hermanito, no dudo en continuar con el recorrido que lo llevaría hacia él. Comenzó acelerar sus pasos y rápidamente estuvo frente a la puerta del cuarto de sus padres. Abrió y con la pequeña luz de su lámpara, apuntó a la cama en donde supuestamente estaría durmiendo su hermanito. Pero no lo vio, solo estaban las sabanas con las que estaba envuelto, cuando quiso reaccionar, sintió un fuerte golpe en la cabeza.
Al recuperarse, pudo ver como dos brazos peludos y con garras en cada dedo de las manos, se metían debajo de la cama, y gritó, su mamá al escuchar el grito, fue en su ayuda y mi amiga le dijo lo que había pasado, entonces con mucho valor vieron bajo la cama y ahí estaba su hermanito. Estaba durmiendo tranquilamente, notaron que tenía unos rastros de pelo negro, lo que fue curioso pues él estaba rapado, después de eso fueron a la sala de su casa, en donde esperaron a que volviera la luz y nunca más dejaron solo al bebé.
Cabe señalar que solo ocurrió esto cuando el bebé estaba en el cuarto de los padres, ya que cuando dormía en el cuarto de verónica no pasó nada extraño con él. Mi amiga dice que esa cosa peluda, se lo quería llevar, pero no pudo ya que el bebé tenía un rosario en su cuello.
Mi amiga verónica, vivía cerca de un terreno que estaba alambrado pero que tenía varios árboles, digo esto porque me relató otras historias que después les contare. Ella tenía un hermanito pequeño, como de un año y medio, al cual siempre lo ponían a descansar sobre una hamaca, la cual estaba en el cuarto de mi amiga y este tenía una ventana que miraba hacia el terreno lleno de árboles y monte.
Un día, como a las seis de la tarde, se fue la luz en toda la colonia, donde vivía mi amiga, por lo que su casa quedó a obscuras, entonces su mamá. la mandó por el bebé pues estaba durmiendo y cuando despertara le iba a dar miedo, al ver la obscuridad. Ella pasó primero a su cuarto por una lámpara de mano, para iluminarse, pues el cuarto de sus padres estaba al fondo y ahí estaba el bebé, pues esta vez, no lo habían colocado en la hamaca para que durmiera, con la lámpara en la mano verónica, se dispuso a ir hacia el cuarto de sus padres, pero tenía algo de miedo.
Cada vez que daba un paso, sentía que alguien la miraba por detrás, pero como quería mucho a su hermanito, no dudo en continuar con el recorrido que lo llevaría hacia él. Comenzó acelerar sus pasos y rápidamente estuvo frente a la puerta del cuarto de sus padres. Abrió y con la pequeña luz de su lámpara, apuntó a la cama en donde supuestamente estaría durmiendo su hermanito. Pero no lo vio, solo estaban las sabanas con las que estaba envuelto, cuando quiso reaccionar, sintió un fuerte golpe en la cabeza.
Al recuperarse, pudo ver como dos brazos peludos y con garras en cada dedo de las manos, se metían debajo de la cama, y gritó, su mamá al escuchar el grito, fue en su ayuda y mi amiga le dijo lo que había pasado, entonces con mucho valor vieron bajo la cama y ahí estaba su hermanito. Estaba durmiendo tranquilamente, notaron que tenía unos rastros de pelo negro, lo que fue curioso pues él estaba rapado, después de eso fueron a la sala de su casa, en donde esperaron a que volviera la luz y nunca más dejaron solo al bebé.
Cabe señalar que solo ocurrió esto cuando el bebé estaba en el cuarto de los padres, ya que cuando dormía en el cuarto de verónica no pasó nada extraño con él. Mi amiga dice que esa cosa peluda, se lo quería llevar, pero no pudo ya que el bebé tenía un rosario en su cuello.
Comentarios
Publicar un comentario