Esta es la segunda parte de una vivencia personal que ocurrió en mi casa, en esta ocasión sufrimos la visita de un ente el cual podría ser un fantasma o un duende, el cual le gustaba hacer escándalos en la azotea de mi casa. Como les había platicado los ruidos empezaron a hacer más frecuentes y también se incrementaron las manifestaciones pues a veces se veían sombras que pasaban de un lado para otro y cuando volteábamos a ver que era no había nada, los ruidos pasaron de ser de un cascabel a pasos y golpes en los cuartos que además de no estar construidos del todo tampoco tienen luz. En una ocasión yo y mi hermana para hacernos los valientes dormimos en esos cuartos, solo subimos una cama con un colchón y conectamos un cable a la corriente de debajo de la casa para que tuviéremos luz, y así pasamos la noche primero no podíamos dormir por miedo pero después empezamos a jugar cartas con la baraja española, así hasta que nos dormimos como a las cuatro de la mañana. En esa